Escudo de la ciudad

Escudo de la ciudad
El escudo de Rosario fue diseñado por Eudosro Carrasco, autor junto a su hijo Gabriel, de los Anales" de la ciudad. La ordenanza municipal lleva fecha de 4 de mayo de 1862

MONUMENTO A BELGRANO

MONUMENTO A BELGRANO
Inagurado el 27 de Febrero de 2020 - en la Zona del Monumento

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miércoles, 31 de marzo de 2010

SAN LORENZO 1 PARTE

1. BIENVENIDOS A ESTA CASA






Ud. ha ingresado al museo histórico Convento San Carlos. Es una casa cuyos orígenes se remontan a 1780, época de la radicación de los hermanos franciscanos en esta zona.

Los franciscanos fundaron y conservaron durante dos siglos esta reliquia histérica, declarada Monumento Histórico Nacional por ley N• 12.648 (año 1940). La comunidad franciscana con-
tinúa viviendo en este lugar, habiendo librado un amplio sector del convento para sede del museo que Ud. visita.
Éste museo histórico es PRIVAD0 y, no goza de subvenciones. La comunidad franciscana no percibe ni administra los ingresos del museo, dirigido por una Comisión Ad Honores.

2. CAPILLA ANTIGUA. ARTE RELIGIOSO

Este ambiente era la primitiva capllla destinada a la oración de la comunidad religiosa, hoy convertido en sala de arte sacro.

Aquí se cantó el himno de acción de gracias por el triunfo de las armas de la patria en la jornada del 3 de Febrero de 1813.
Y el día siguiente se celebró la misa en sufragio de los caídos-patriotas y realistas- en el combate librado frente, casi a las puertas de este convento.
El 10 de febrero del mismo año se celebraban aquí las honrasfúnebres del Capitán Justo Germán Bermúdez, antes del traslado de sus restos mortales a Buenos Aires.
Las gradas superiores del primitivo altar pueden observarse al frente, junto a las imágenes de San Francisco de Asís v Santo Domingo de Guzmán, que ocupaban esos lugares, presididos por una pequeña imagen de la Inmaculada Concepción, talla policromada que se exhibe al ingreso del claustro, a la izquierda, frente al busto del General San Martín.

Tallas policromadas de los siglos XVII, XVIII y XIX, así como algunos óleos de la misma época completan la colección de arte sacro.

En las vitrinas diversos objetos de culto, un confesionario, un facistol para la lectura en el coro y una cruz con diversos símbolos. Era ésta un elemento didáctico utilizado por los misioneros para relatar la Pasión de Cristo.

El ambiente de bóveda baja era la sacristía del actual templo. Un piano, dos violoncelos que pertenecieron a la orquesta conventual; un globo terráqueo construido por el franciscano
Zattoni. Relojes del 1700, un organillo italiano, sillas y otros muebles de época





3. CEMENTERI0 CONVENTUAL

Ud. ingresa ahora al sector más antiguo. Fue inaugurado 6 de Mayo de 1796, luego de más de cinco años de trabajos construcción. Se trata de una edificación en ladrillo cocido asentado en barro, aberturas de cedro paraguayo, techo de palma y alfajías con tejuelas.
Una sucesión de arcos dan un aspecto típicamente colonia místico al sector, denominado claustro, es decir el lugar de recogimiento donde moraban los religiosos franciscanos de
primera generación. Cada habitación o celda estaba destina a un religioso, ambiente en el que vivía, oraba, estudiaba y trabajaba.
A la izquierda el cementerio conventual. Aquí descansan muchos de los misioneros franciscanos evangelizadores del norte santafesino, Chaco y Formosa. En la parte superior de cada urna está la identificación del religioso cuyos restos se guardan.
Los religiosos del convento, al fallecer, son inhumados en el lugar.
La primera urna de la izquierda, señalada por el escudo nacional, contiene los restos de granaderos caídos en la acción de 3 de Febrero de 1813. Una placa de bronce evoca los nombres
de los mártires de la jornada y otra de mármol el gesto heroico de Juan Bautista Cabral.

4. COMBATE

A través de la vidriera se aprecia en su conjunto el recinto que albergó al Coronel San Martín, Jefe de Granaderos. Se trata un ambiente mayor qile una celda y que fuera la primitiva sala capitular o guardianal del convento. Allí se acondicionó lo necesario para el alojamiento del Libertador; una modesta cama, un arcón, mesa y sillas. Una lámpara, un crucifijo, útiles, escritorio y libros. Los ladrillones del piso resaltan la austeridad del ambiente.

En las vitrinas de esta sala se exhiben objetos personales del Gran Capitán, un sable recogido en el Campo de la Gloria, proyectiles de la jornada del 3 de Febrero de 1813 guardados por los religiosos franciscanos cuidadosamente durante más ciento cincuenta años. Dos alegorías evocativas de la jornada del 3 de Febrero de 1813, un óleo del Pino a cuya sombra el Gran Capitán dictó el parte del combate y fotocopia de éste. Croquis del desembarco y posición de ambas fuerzas, realista y patriotas.
Uniforme de granadero.




5. HOMBRES Y HECHOI

Cada una de estas celdas que Ud. visitará están convertidas en salas de exposición permanente; cada una configura una unidad temática y su conjunto intenta reflejar, mediante diversos
documentos, la vida de la comunidad franciscana, su labor misionera y su vinculación con los acontecimientos y hombres mas destacados del acontecer nacional.

Una reproducción al óleo de la espadaña desde la cual el Coronel de Granaderos observó los movimientos realistas, elemento arquitectónico que puede observarse desde el extremo del
claustro; mirando hacia el ángulo sureste del patio.
En una vitrina se exhibe la primera bandera izada en el mástil del Campo de la Gloria (1950). Pergamino recordatorio de la colocación de la piedra fundamental del monumento a erigirse
en conmemoración de la Acción de San Lorenzo (1913). Libros dedicados por sus autores a la comunidad franciscana.
Un rincón dedicado al Tte. Gral. Pablo Riccheri, hijo ilustre deSan Lorenzo y alumno de la escuela San Carlos: fotografías y documentos.


6. CONSTRUCCION DE CONVENTO
Esta sala refleja la evolución de la construcción del edificio conventual a partir de sus primeras etapas en 1790: planos de la planta del edificio, de la iglesia, moldes utilizados en la fabricación de ladrillos para usos diversos. Herrajes varios. Llaves antiguas.

Adobes y otros elementos procedentes de Misiones y Corrientes.

7.8 y 9. OBJETOS DEL C0NVENT0

Estas tres salas presentan objetos de la vida doméstica de la comunidad franciscana, las inquietudes ¡intelectuales de los hermanos, la vida litúrgica, la austeridad de los utensilllos de uso
diario,, el trabajo manual. Cada objeto evoca una tarea, una preocupación o un momento de la vida diaria de los hermanos misioneros.
El patio, otrora poblado de naranjos y vides, era un lugar de recogimiento y de paz, propicio para la oración.

10 LA BOTICA DEL CONVENTO

Hasta 1875 la única farmacia del pueblo era la de los hermanos franciscanos. Potes de loza inglesa (1850) Microscopio, blanza de precisión, almíreces, evocan la tarea diligente del hermano farmacéutico, auxiliado por el trtado de yerbas medicianales.

bIBLIOGRAFÍA: Del folleto que entregaban en la década del 80 cuando se visitaba el Convento San Carlos.

viernes, 26 de marzo de 2010

SAN MARTIN PASO POR ROSARIO


El 2 de febrero de 1813 el coronel José de San Martín, al mando de los granaderos a caballo, pasó por Rosario, denominado entoncés Pago o Partido de los Arroyos. Allí se entrevistó con el Comandante Celedonio Escalada. Las milicias del citado militar y el cura párroco Julián Navarro, se sumaron a la huéstes del Gran Capitan, que el 3 de febrero de 1813 concretó el histórico combate en frente del convento San Carlos, en San Lorenzo, batiendo a las fuerzas realistas e iniciando la epopeya que finalizó con la libertad de Argentina, Chile y Perú.

Bibliografía extraída de Güia de Rosario de Francisco Planos

lunes, 22 de marzo de 2010

REVISAR EL PASADO para vislumbrar un futuro





Por Mirta Sellares

Después de la batalla de Caseros, en l852,los ríos interiores fueron abiertos al comercio exterior Rosario fue declarada ciudad y puerto principal de la Confederación Argentina Y la Constitución Nacional de 1853 estableció las bases jurídicas para ese nuevo orden.

Llegaron miles de inmigrantes europeos, canadienses y norteamericanos. Entre ellos, labriegos, artesanos, comerciantes, empresarios, industriales, ingenieros, pedagogos y artistas. Muchos de estos últimos eran retratistas, escultores y grabadores que adherían al academicismo – especialmente en decoración- vigente en Europa que, con el desarrollo de sus oficios, profesiones y saberes, sin proponérselo orgánicamente, impulsaron las primeras enseñanzas de técnicas de otros lares.

Algunos de estos trabajos, de gran valor testimonial, recrean a la Rosario de entonces. En los clasificados de las publicaciones de la época pueden leerse ofrecimientos para realiza retratos y restauraciones de obras, de profesionales que visitaban Rosario atraídos por el potencial que ofrecía la ciudad. Lamentablemente, muchos de estos trabajos se perdieron. Pero quedaron algunos testimonios, realizados como "material propagandístico" para atraer inversiones de capitales y pobladores.

En 1855, el ingeniero norteamericano Allan Campbel decía "Hay un llano o playa más baja, a lo largo del río y delante del pueblo, de una milla de largo... Buques de gran calado pueden fondear junto a la playa... las ventajas naturales para la carga y descarga son excelentes... ", en un informe solicitado para establecer factibilidades de proyectar una línea de ferrocarril entre Rosario y Córdoba

En el Museo Histórico Provincial "Julio Marc" se encuentran dos dibujos a lápiz del dibujante y grabador francés Juan León Palliére realizados en 1858, que muestran vistas del puerto de Rosario. En su “Diario de un Viaje por América del Sud", escribió "La ciudad se halla a una altura cortada a pique.... es de lo mis pintoresca. Los gauchos bien formados, con grandes y bellas cabezas, llevan. trajes de colores más vivos que en Buenos Aires,:. La ciudad nueva ha sido edificada con ladrillos, las casas son de un solo piso, es decir de planta baja- Se construye por todas partes.... La mayor parte de los habitantes son

inmigrantes, principalmente colonos italianos y vascos." ,

Según Wladimir Mikielievich" una de las imágenes más difundidas del Rosario de antaño es el grabado en acero del doctor Tomás J. Hutchinson. Fue incluido por primera vez en. Londres, en su libro "Buenos Aires and Argentine Gleanings with extracts from a diary of Salado Exploration in 1862 and 1863". Este informe era parte de un relevamiento para incentivar la explotación de algodón en la cuenca del río Salado. También incluía un ambicioso plan de convertir a las islas en plantaciones de algodonales. El Cónsul lnglés pensaba en las ventajas de contar con terrenos separados por el agua, protegidos de los rebaños de animales y el fácil acceso a los barcos que cargarían sus bodegas con "oro blanco" para abastecerla industria textil inglesa en apogeo por esa época.

Et grabado de ,Hutchinson reproduce las inmediaciones de la Bajada en su nivel original, en el acceso a la zona de embarcaderos. Hoy este terreno corresponde a la Bajada Sargento Cabral, con la altura que requirió el relleno de ese sector en 1899 bajo la Intendencia de Lamas, quien aprobó las obras de construcción de la Avenida Belgrano. El objetivo era evitar los avances del agua en períodos de creciente. Puede observarse la estrategia de ex-

pansión a futuro que establecía una Ordenanza Municipal de 1873. Los ranchos visualizados en el primer plano se encontraban en las barrancas extendidas al noroeste de la Bajada. Esto correspondería al sector del Bajo donde se desarrollaban actividades portuarias. En segundo plano, la sección correspondiente a la Ciudad, que presentaba las mayores posibilidades de consolidación a corto y mediano plazo. Se distingue la silueta de Iglesia y las características de la arquitectura italiana en el resto de las construcciones.

Los sectores de Extramuros y Suburbios establecidos en la Ordenanza se encontraban alejados. El primero correspondía a los terrenos ubicados desde Boulevard Santafesino y Boulevard Argentino hasta 27 de Febrero y Francia respectivamente, mientras que en el amplio territorio del segundo se fundaron los asentamientos de Ludueña" San Francisquito y Saladillo. Pasaron 150 años desde la Declaración de Ciudad. Mucha agua ha corrido.

Aquellas barrancas, habitadas desordenadamente según testimonios gráficos, hoy pre-sentan construcciones portuarias, instalaciones de clubes costeros y se eleva el anhela-

do puente Rosario-Victoria. A pesar de estas transformaciones, muchos descendientes de aquellos inmigrantes se van en busca de un futuro propio y para sus hijos.¿Qué ha pasado? Será necesario mirarnos en el espejo de la historia para analizar los resultados y definir qué proyecto queremos para Rosario.-



Tbmás J. Hutelinson (1802-1888). Doctorado en Medicina en Alemania fue Cónsul de S.M. Británica en Rosario entre 1862 y 1870. Representaba agencias comerciales inglesas para las que realizó una expedición para evaluar el potencial desarrollo del cultivo de algodón en Santa Fe. Se preocupó por la exportación de carne a Inglaterra, introduciendo mejoras en el Saladero Once de Setiembre. Al desatarse la epidemia de cólera en una casa de calle Bajada Nro 35, brindó una importante asistencia médica.







EVOLUCION DE ROSARIO A TRAVÉS DEL SIGLO XIX

por Javier Etcheverry.

Hacia 1842, cuando aún era una villa, Rosario de Santa Fe albergaba en su núcle central y alrededores a unos 1500 habitantes. De ellos, 39 eran europeos. Los oriundos de Italia totalizaban 10 personas. Ese año arriba desde Chiavari (en la costa ligur) Pedro Tiscornia, que se converitiría en un destacado empresario. La famosa "casa de Tiscornia" se ubicaría frente a la plaza principal. Los genoveses -junto con los vascos- constituirían el núcleo de la dinámica clase dirigente rosarina que se desarrolló en buena medida gracias al comercio, al menos inicialmente, ya que luego fueron diversificándo sus inversiones, especialmente hacia el negocio inmobiliario y las actividades agrícola-ganaderas. Cabe recordar que los genoveses, a través de Sevilla, también tuvieron un rol de primera magnitud en el descubrimiento y explotación inicial de las riquezas americanas. Desde el medioevo Génova y Venecia constituyeron imperios comerciales que extendieron sus redes por el mundo europeo y extra-europeo (Cercano, Medio y Extremo Oriente, Africa). Volviendo a la historia local, hacia 1842 Rosario contaba con 40 casas de ladrillos. La mayor parte de la población vivía en ranchos. El precario puerto se limitaba a recibir las pocas mercaderias necesarias para el consumo local, pero pronto se registrarían transformaciones significativas. En 1855 el chileno Vicuña Mackenna atraviesa Rosario en un viaje a través de la Argentina, testimoniando que la ya por entonces ciudad estaba edificada con mucha regularidad en 3 calles paralelas desde la barranca del río Paraná hacia la pampa. La población se aglutinaba en 20 manzanas de caseríos bien construidos. La creciente inmigración europea impulsaba el crecimiento, especialmente -escribe Vicuña- "esos sobrios y laboriosos genoveses en cuyas manos está monopolizado todo el comercio del Plata". Rosario -sigue expresando el viajero trasandino- "es una colonia italiana". Vale la pena aclarar que genoveses, venecianos, lombardos, toscanos y flamencos -que impulsaron desde los inicios de la Baja Edad Media el desarrollo económico de Europa y sentaron las bases de la economía capitalista- eran católicos, lo cual relativiza la generalizada idea de que el capitalismo se haya estrechamente ligado con el protestantismo. El médico lombardo Paolo Mantegazza visita Rosario en 1858 y se asombra ante los cambios vertiginosos: "oficinas, almacenes, casas, calles, plazas, surgen unas detrás de las otras y los nuevos habitantes que accedían en multitud mandaban que les precediesen arquitectos y albañiles". Otro genovés, el ingeniero Nicolás Grondona, desarrollará un papel sumamente importante en el desarrollo urbano de la ciudad. Se instala en Rosario en 1856 y proyecta su crecimiento urbano. En "Historia genealógica de las primeras familias italianas de Rosario" de los investigadores Sebastián Alonso y Ma. Margarita Guspí Terán se traza una breve biografía de los hermanos Grondona, las cuales reproducimos: "Nicolás Grondona nació en 1826. Se graduó de ingeniero. Combatió como oficial a las órdenes de Carlos Alberto de Saboya en la guerra de independencia italiana. Junto con su hermano Marcelo, llegó a Montevideo en 1849, trasladándose al año siguiente a Buenos Aires. Luego recorrieron Corrientes y Entre Ríos y finalmente se instalaron en Rosario en 1856. Crearon la sociedad 'Grondona Hermanos' con oficinas en la calle Comercio (hoy Laprida) 81. En 1858 trazó el plano inicial de la ciudad de Rosario y en 1870 el de la ciudad de Buenos Aires. Desde 1865 a 1870, Nicolás Grondona vivió en Europa, asistiendo a la Exposición Universal de Paris de 1866. El 21 de abril de 1871 fue designado Ingeniero Municipal de Rosario. En 1872 promovió la iniciativa para erigir un Monumento a la Bandera, que se construyó en la Isla del Espinillo. Tenía forma de pirámide egipcia y conmemoraba los principales hitos históricos de nuestra nacionalidad. Fue destruido por una gran crecida del río Paraná, probablemente en 1878. Falleció en Buenos Aires el 26 de agosto de ese mismo año. "Marcelo Grondona nació en Génova en 1831. Confeccionó el primer pano de San Lorenzo en 1859 y también el de 1866. Quedó al frente de "Grondona Hermanos" durante la estadía de su hermano en Europa. También hizo la mensura y plano de Carmen del Sauce y posiblemente el de la Colonia Jesús María, hoy Timbúes. Falleció en Rosario el 20 de enero de 1883." El plano de Grondona excede ampliamente los límites de la ciudad de entonces, priponiendo un ordenamiento para lo ya existente. Destaca algunas construcciones a lo largo de la calle Puerto (hoy San Martín): el Mercado de Isola y el Depósito de la Aduana de Danuzio, a las cuales considera capaces de potenciar -en tanto polos estructuradores- el crecimiento racional de la urbe.. Hacia 1864 se constata la publicación del periódico El Cosmopolita. Su responsable es otro inmigrante emprendedor, el canadiense Guillermo Perkins. La ciudad aún no cuenta con un edificio público importante pero sus casas modernas, de arquitectura italianizante, la distinguen de las otras poblaciones argentinas. En 1866 se publica un Album de Fotografías, el famoso Album del fotógrafo Alfeld. Se incluye una foto del plano de Grondona. Allí se observa la centralidad de la actual calle San Martín. En torno a ese eje se van consolidando las calles transversales, incluida la calle Córdoba. Ya en 1873 el trazado urbano logra una mayor complejidad en su proyección al decretarse por ordenanza municipal una estrategia de expansión basada en la delimitación de cuatro zonas urbanas: * el Bajo: zona de actividades portuarias * la Ciudad: área con máxima posibilidad de consolidación a corto y mediano plazo. Se trata de la zona comprendida entre Bv. Pellegrini, Bv. Oroño y las barrancas del río Paraná. Lo que podríamos llamar "la ciudad condal". * Extramuros: de consolidación posible a largo plazo * Suburbios: con predominio rural pero formando parte de Rosario. Por ese entonces la ciudad ocupa solamente el Bajo y, de manera parcial, el sector central o "Ciudad Condal". La ordenanza mencionada normativiza un nuevo proyecto de Grondona, Ingeniero Municipal entre 1871 y 1877. Una litografía de Fleuty que data de 1875 visualiza como se alternan en la ciudad las edificaciones y los espacios vacíos. Tanto la ordenanza citada como los planos sucesivos de 1873 y 1875 (atribuidos a Grondona) proyectan ciudades posibles. El primer censo municipal se realiza en 1900. Se constata que el 74% de los constructores, el 40% de los arquitectos y el 25% de los ingenieros que construyen en Rosario son de origen italiano.


Javier Etcheverry.

Recomendamos la lectura de "Italia-Rosario. Construcción de espacios" (Rosario, 1995). Esta obra contiene investigaciones de Ebe Bragagnolo, Beatriz Chazarreta, Roberto De Gregorio, Higinio Del Pozo, Silvia Dócola y Mónica Stabile. La misma nos ha servido de base para la elaboración de esta nota divulgativa.

EL ROSARIO DEBE SER CAPITAL REPUBLICA

Hace 15 años que vivimos en un provisoriato funesto respecto de Capital. Y este provisoriato amenaza continuar.¿Qué? ¿Sólo lo provisorio habrá de ser siempre permanente entre nosotros? Ya basta de incertidumbre. Ya es época de decidir de una manera definitiva y concluyente dónde deben tener su asiento las Autoridades nacionales, ofreciendo así esa seguridad más a los grandes intereses que aguardan impacientes esa resolución. Ningún pueblo de la República puede sostener con el Rosario la competencia, sobre las condiciones y ventajas positivas que reúne para ser el punto de residencia de las autoridades nacionales. La cuestión presenta fases variadas y complejas, pero bajo cualquiera de ellas que se estudie, el Rosario será siempre el que mejor responda a todas las grandes conveniencias que deben consultarse para decidir en tan grave cuestión. En la Solución de la cuestión Capital, deben tenerse en vista, no sólo los beneficios que ella puede ofrecer al país, sino también los males que es necesario prever y que es prudente evitar. La situación geográfica del Rosario lo coloca en condiciones ventajosas para hacer fáciles, realizables y fecundas para los pueblos esas ventajas, y para alejar también los peligros que pueden amenazarlos en lo futuro. Las fuerzas activas de la República, las fuerzas que pesan más decisivamente en el orden de todos los acontecimientos políticos y sociales, residen en la gran línea del Litoral, formada por las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos y Corrientes. Colocado como se halla el Rosario en el centro de esa gran línea, es decir, en el centro de todas esas fuerzas, el Gobierno aquí regularía sus movimientos y trazaría a esos grandes centros de poder la órbita en que deberían girar para bien general de la República. El poder de Buenos Aires, que ha de ser siempre una amenaza para los pueblos mientras aquella provincia se mantenga como hasta aquí dominada por un círculo exclusivista y anárquico, ese poder se encontraría contenido por la proximidad del Gobierno Nacional, establecido en un punto fuera del alcance de su influencia; se hallaría observado de cerca y forzosamente estrechado dentro de los límites territoriales de su provincia. Buenos Aires se vería detenido por la presencia de la Autoridad Suprema de la República, y sujeta a la Unión Nacional por la Ley de las conveniencias y de la necesidad. Por ese lado, la capital en el Rosario neutraliza el poder de Buenos Aires, garante a los pueblos contra toda tentativa anárquica cuya iniciativa puede partir de aquel centro, y asegura también a la República contra las criminales tentativas de desmembración. Entre Ríos y Corrientes no ofrecen por hoy ningún peligro, pero el Gobierno General debe hallarse en condiciones de estrechar más y más los vínculos que ligan esas Provincias a la nacionalidad argentina. Ellas que son de las más productoras y ricas de la Confederación, demandan también el cuidado y dedicación esmerada de parte de la autoridad nacional para comunicar mayor impulso a su prosperidad y riqueza, a la vez que con su poder son para él una verdadera garantía, un respeto que ha de contener siempre la anarquía y dar seguridades de permanencia sólida y estable a esa misma autoridad nacional. Por este lado también, la Capital en el Rosario ofrece todas las ventajas apetecidas, y funda así un gobierno fuerte, colocado fuera del alcance de la movilidad que traen las luchas políticas, y estrecha más y más los vínculos de fraternidad que deben ligar siempre a los pueblos, aproximándolos para que se conozcan, y se enlacen por recíprocas relaciones políticas y comerciales que hagan más firme y duradera la paz. Por lo que respecta al Litoral, pues, estudiando la cuestión bajo el punto de vista político y administrativo, el Rosario es el único punto en que puede ventajosamente situarse el Gobierno Nacional respondiendo a todas las ventajas, a todas las necesidades y conjurando todos los peligros. Cualquier otro punto que no fuera éste, ofrece inconvenientes que sería en extremo fácil señalar. Por lo que hace al Interior, las Provincias necesitan un Gobierno que vigile de cerca por ellas, que oiga la voz de sus necesidades, que repare solícito los desastres que les ha causado la anarquía, que impulse su comercio, que promueva su industria, que propenda al desarrollo de su riqueza, que fomente la fundación de instituciones útiles, que lleve hasta ellas el espíritu de mejora y progreso, que las ponga en fácil contacto con las plazas comerciales activas y ricas, y que con las fuerzas del litoral garanta la paz, el orden y su quietud interior. Sólo del Rosario pueden partir para los pueblos estos grandes beneficios. El Gobierno aquí establecido sería el primer interesado en la paz de las Provincias, porque toda perturbación sería para él una amenaza y un peligro. No comprendemos cómo haya en el Congreso quien vacile al dar su voto en la cuestión. Con examen detenido, con espíritu patriótico, con amor al adelanto y progreso de nuestros pueblos, con ánimo desapasionado, nadie puede dejar de convenir en que el Rosario es el punto señalado por la naturaleza y por la política, para ser capital de la República. De aquí debe partir para todas partes la palabra de unión y el espíritu de orden que han de fundar la paz, estrechar la unión, impulsar a la República en el camino de su engrandecimiento moral y material, y regenerar a los pueblos por el trabajo, por la industria y por la riqueza. La capital en el Rosario sería la única solución conveniente que puede darse a las grandes cuestiones políticas y administrativas que nos han agitado y dividido hasta hoy. Cada provincia argentina tiene un interés positivo, sólido, perfecto en que este hecho se realice. La palabra del Congreso que así lo determinara, sería el fiat luz para esta República que vaga hace 50 años en el caos de las tinieblas y de las vacilaciones. Desee al fin un paso firme. Sancione el Congreso esa ley que tiene en estudio desde hace tanto tiempo. Este proyecto que se eterniza entre los empolvados legajos de la Secretaría, debe al fin salir a luz. La capital en el Rosario haría la prosperidad de la República. La capital en Buenos Aires sin traer grandes beneficios para aquel pueblo, hace la ruina del resto de la Nación. Aun cuando fuera posible el ridículo fenómeno de la coexistencia en Buenos Aires de los dos Gobierno, Nacional y Provincial, esa coexistencia trae así misma aparejadas inconvenientes de tal naturaleza que la convierten en un absurdo, en una extravagancia política. Hoy que la coexistencia ha desaparecido, el fenómeno es mayor todavía. El Gobierno Nacional no tiene residencia, se encuentra en Buenos Aires como huésped, sin jurisdicción alguna sobre el territorio en que tiene su asiento; y sólo no teniendo ni la más ligera noción de Gobierno, puede pretenderse posible el Gobierno sin tener un pedazo de tierra, centro de poder y de recursos, teatro de acción donde se ejerza una jurisdicción propia, exclusiva y amplia. Al Congreso Argentino toca poner de una vez el sello a nuestras vacilaciones, el único punto final que hoy es posible a los males que afligen a los pueblos, dotando al país definitivamente de una capital que ejerza en él una influencia bienhechora y fecunda. Inspírense los representantes de los pueblos argentinos en las grandes conveniencias de la República, y echen su voto en la balanza de nuestros destinos futuros, para asegurar para siempre los beneficios que los pueblos aguardan impacientes.¡Óigase su voz, como la palabra de redención para los pueblos mártires! José Hernández.( Nota Aparecida en el Diario "La Capital" de Rosario, el 4 de julio de 1868

A

martes, 16 de marzo de 2010

DILIGENCIAS A SAN LORENZO " LA ROSARINA"

En 1873 fue la primera en establecer un doble servicio diario. Salía de Rosario a las 6 de la mañana y a las 3 de la tarde. Regresaba de San Lorenzo a las 3 de la tarde y a la 6 de la mañana del día siguiente, la segunda. Las diligencias "La Rosarina" partían de la calle Puerto Nº 120 ( hoy San Martín) entre Santa Fe y Córdoba)cubriendo el trayecto en dos horas con una parada en la Posta de Silva en la inmediaciones de la actual estación de la ciudad de Capitán Bermúdez del Ferrocarril Gral. Belgrano (ex Santa Fe).

FUENTE: Bibliografía: de Güia de Rosario de Francisco Planos.

ROSARIO DECLARADA CIUDAD

Rosario fue declarada ciudad 1852. Los progresos eran tan evidente que la Villa del Rosario fue reconocida por el Gobernador Crespo y por la legislatura santafesina. Por ley el 5 de agosto de 1852 se le reconoce con el título y rango de CIUDAD
Sarmiento, en enero 1852 saludó el nuevo año con una carta dirigida al vecindario, en la que auguraba" El Rosario está distinado por su posición geográfica a ser uno de los más poderosos centros comerciales de la República Argentina.

Fuente: Bibliografía de la Güia de Rosario de Francisco Planos

LA PRIMITIVA CAPILLA



La primitiva capilla de la Virgen del Rosario, se construyó en tierras de Domingo Gómez Recio. En 1757 el capitán Santiago Montenegro donó el terreno en donde actualmente se levanta la capilla( manzana entre Córdoba, Juan M. de Rosas, Santa Fe y Buenos Aires) para que " La santa iglesia esté con mayor deshogo y la divina señora sea adorada y reverenciada con dencencia".A través de los años (1810,1823,1836,1854 y1866-archivo parroquial-) se introduce mejoras y reformas a la iglesia. En 7 de diciembre de 1888, se bedijo el actual templo de la Virgen del Rosario.Ingresando por una de las escaleras laterales, accedemos al subsuelo y nos encontramos con el Camarín de la Virgen, que puede albergar a 150 personas y fue inaugurado en mayo de 1925.Este templo comenzó con un pequeño oratorio, más tarde, en 1966 fue elevada al rango de "Basílica menor" y recientemente, en 1998 fue nombrada Santuario.La nueva Capilla del Santísimo, pequeña y acogedora, bendecida en 1998. Continuando, llegamos al crucero y allí podremos admirar el altar mayor construido en mármol de carrara y en estilo renacentista, concebido en Génova y traído en partes.

Fuente: Bibliografía de Güia de Rosario de Francisco Planos.

FLORENCIO SANCHEZ Y EL TEATRO LA COMEDIA


En 1886 se estrenó aún inconcluso, el viejo teatro La Comedia. Allí desfilaron grandes actores argentinos y extrajeros. El talentoso dramaturgo Florencio Sánchez representó con gran éxito por primera vez su inmortal obra titulada "Canillita"

FUente: Bibliografía de Güia de Rosario de Francisco Planos.

EL PRIMER CRONISTA ROSARINO

Don Pedro Tuella es considerado el primer cronista de Rosario. En 1775 ya vivía en la villa. En 1796 había instado su pulpería. En abri de 1801 publicó en "Telégrafo Mercantil Rural Político Historiógrafo del Río de la Plata", su "Relación histórica del pueblo y jurisdicción de Rosario de los Arroyos en el gobierno de Santa Fe" Falleció en Rosario a los 76 años en 1814.

Fuente: Bibliografía de la Güia de Rosario de Francisco Planos

EL POETA JOSE HERNANDEZ

En 1894 el autor de MARTIN FIERRO se instaló en Rosario, donde alquilo una casa en la calle Buenos Aires al 800. Se presume que buena parte de su obra gauchesca la escribió en el entoncés Pago de los Arroyos.

Biblografía: Güia de Rosario de Francisco de Planos

lunes, 15 de marzo de 2010

Rosario, su orígen

Después que Belgrano 1812 crea el Pabellón de la Patria, el 27 de febrero a orillas de Paraná y además establece la Batería Libertad situada a espaldas de la Capilla y sobre la cresta de la barranca, bastión que fue levantada juntocon la Batería denominada " Independencia", situadas en la isala en frente al antiguo Pago de los Arroyos como se lo denominaba a ROSARIO

Bibliografía: Güía de Rosario de Francisco Planos